Las fuentes de las obligaciones son los hechos jurídicos que dan origen a ellas.
Justiniano señaló cuatro fuentes de las obligaciones: contratos, delitos, cuasicontratos y cuasidelitos. Sin embargo, a lo largo del Corpus iuris encontramos varias citas que demuestran que, para los bizantinos, estas cuatro fuentes no agotaban la materia en cuestión, mencionando como fuentes adicionales la pollicitatio y el votum.
En cuanto a las cuatro fuentes justinianeas, consideremos que:
- El contrato puede definirse como un acuerdo entre varias personas, que tiene por objeto producir una o más obligaciones civiles.
- El delito es un hecho humano contrario al derecho y castigado por la ley.
- El cuasicontrato es una figura parecida al contrato por su licitud y sus consecuencias, pero en el cual no se encuentra el consentimiento entre los sujetos como elemento constitutivo, lo cual separa los cuasicontratos de los contratos.
- El cuasidelito es un acto ilícito, pero que el derecho romano no clasificaba entre los delitos. Produce una obligación entre el autor del acto y el perjudicado.
En relación a la pollicitatio, consistía en la oferta hecha al público en general. El votum eran ofertas hechas por justa causa a una ciudad o un templo.